Sernac sobre La Polar: “Hay un engaño respecto de qué prendas están siendo vendidas, incluso pudiendo ser originales”

El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) concretó lo esperado y presentó una demanda colectiva contra La Polar, por venta de ropa falsificada y falta de información entregada sobre las prendas.

La decisión fue tomada tras denuncias de marcas como Adidas, Under Armour y Columbia, una investigación de la institución y 223 reclamos en contra de la multitienda, que calificó la demanda como apresurada e injustificada.

Antecedente clave para la demanda fue una escritura pública celebrada entre Columbia y La Polar, donde la multitienda habría admitido haber vendido prendas falsas por error, compradas a un proveedor extranjero.

En entrevista con DF, el director nacional del Sernac, Andrés Herrera, contesta a la empresa y señala que la decisión “está lejos de ser injustificada y está fundada incluso en antecedentes que emanan de la propia La Polar”. En 2021 ya registraban 48 reclamos por compra de productos falsificados y estiman que la empresa habría estado vendiendo prendas de este tipo al menos desde 2020.

-La demanda habla de que La Polar ya admitió haber vendido ropa falsificada ante Columbia, ¿cuándo fue esto?

-Ese antecedente es muy importante, es una escritura pública entre Columbia y La Polar, a la que tuvimos acceso. En septiembre de 2020 Columbia ya había tomado conocimiento de la venta de productos no originales y envió una carta a La Polar dándole a conocer la situación. La Polar se comunica con la marca para solucionar esto de manera amistosa y, en esta escritura (de enero de 2021), declara no solo reconocer los derechos exclusivos de Columbia, sino también que adquirió productos no originales de buena fe a un proveedor extranjero.

-No se informó a los consumidores de esto, ¿cuál es la postura del servicio respecto a la marca?

-Esperamos que ante estas situaciones nos pongan en conocimiento, para cautelar no solo sus propios derechos, sino también de los consumidores. Para el futuro, estamos trabajando en un aplicativo que permita, a través de una estrategia teléfono rojo, establecer un canal seguro en que se tenga la certeza de que la información que nos aporten será confidencial.

-En este caso, ¿no habrá procedimientos contra las marcas?

-Citamos a algunas como Under Armour, Forus y Columbia para que nos contaran su versión y citaremos a otras. Concluido este proceso, veremos qué decisión tomamos, pero el problema principal es La Polar, por su relación directa con los consumidores.

-¿Podría caer la responsabilidad en las fábricas extranjeras?

-Las fábricas no obran por cuenta propia, producen las prendas a solicitud y requerimiento de las marcas, con determinados estándares de calidad y stocks para cada mercado. Puede darse la situación –y lo desconocemos- de que produzcan un exceso más allá de lo requerido y puedan comercializarlo en un mercado no regulado, pero no es que puedan vender libremente y afirmar que son originales, la propia marca es quien determina aquello.

La industria y las multas

-Se investigan otras empresas, ¿es esta una práctica común?

-No podría aseverar responsablemente esto, no hay antecedentes que permitan concluir que es algo generalizado en el comercio formal.

-¿Hay reclamos o se investiga por precaución?

-Hay dudas de consumidores respecto de la originalidad de productos, evidentemente hay que analizarlo con cuidado. Pero también tiene que ver con poner vestuario que puede ser de segunda categoría, de saldos de stock, bajo el modelo outlet, que puede ser original, pero a los consumidores no les quedan claros los atributos de las prendas.

-¿Pasó esto con La Polar?

-La Polar se presenta como un retail tradicional, entonces que se incorpore la figura de outlet o súper precio, no dice nada a los consumidores. Ahí hay una omisión deliberada de información. En el fondo, hay un engaño respecto de qué prendas están siendo vendidas, incluso pudiendo ser originales. Eso también es grave.

-Se piden multas de hasta 3.000 UTM por consumidor, ¿qué tan lejos se llegará en vista de los problemas financieros de La Polar?

-La situación es extremadamente grave, se ha vulnerado la confianza en el comercio formal. Va a depender de cuán dispuesta esté La Polar para resarcir este perjucio a los consumidores afectados y, dependiendo del caso, veremos la voluntad de avanzar en un potencial acuerdo. Mientras eso no ocurra, vamos a perseguir todas las responsabilidades. Por esto, planteamos al tribunal la necesidad de establecer un plan de cumplimiento.